Se presentaba una buena noche. Era el 30 de noviembre en la sala Apolo de Barcelona. Una cartel magnífico: Yo La Tengo teniendo como teloneros al grupo Bradien. Eran las 19:30 de la tarde y sólo unos pocos estábamos haciendo cola para entrar... o bien nadie suponía que este iba a ser uno de los mejores conciertos de año o que la tradición española manda llegar después de los teloneros a los conciertos.
Nada más entrar cogimos sitio en primera fila pero al haber tan poca gente (y siendo la sala tan grande) se hacía ridícula la espera. Aprovechamos para comprar una camiseta y coger algo de bebida mientras veiamos incrédulos como los componentes de Yo La Tengo se paseaban tranquilamente por los alrededores de la sala.
Por fin iniciaron el concierto unos tímidos Bradien. Según ellos mismos dicen, este grupo es un proyecto en donde se intenta desarrollar una música que represente diferentes intereses. Muchas veces son ideas propias combinadas con otras ajenas...y esto es lo que demostraron en el escenario.
Mucha experimentación reflejada en un sinfin de sonidos tranquilos, de canciones lentas, pensadas para dejar que la mente vague hacia infinitos matices. Muchos instrumentos diferentes sonaron y se mostró un increible respeto hacia el público. Se notó que aún tienen mucho que recorrer para ofrecer una solidez en la interpretación en vivo pero poseen la maneras y la forma de mostrarlo al espectador. Espero que sigan por este camino y no sucumban hacia intereses más eléctricos. Aquí teneis una canción de su concierto.
Después de la tranquilidad, llegó el rugido (Yo La Tengo). Un rugido manifestado por la incontestable calidad, sinceridad y fuerza con que estos 3 estadounidenses lograron conmover a todos los que allí estuvimos. Un excepcional repertorio muy enfocado en su último album (I am not Afraid of You and I will Beat your Ass) pero que no dejó de lado algunas viejas joyas. No es por nada, pero este grupo lleva más de 20 años haciéndonos disfrutar de una música personal y mágica.
Para muestra, una de sus primeras canciones.
El concierto fué realmente intenso. Cada instante estaba plagado de maestría. Ya sea en la batería, en la guitarra, en el teclado... aún cuando estos instrumentos eran intercambiados por los miembros del grupo (Georgia Hubley, Ira Kaplan y James McNew).
Al final dieron 3 bises porque la multitud no paraba de aclamarlos. Se atrevieron a realizar un cover de Adam Green e incluso tocaron una versión muy particular de la canción "Everlasting Love". Un concierto en mayúsculas que directamente se cuela entre los mejores del año. Creo que es muy difícil de igualar el regusto que deja un concierto como este, sobre todo sabiendo que cuando pagas el precio de la entrada sabes de antemano que vas a degustar un gran reserva.
Os dejo un par de videos más.
Como ya sabéis, podéis consultar más videos de este concierto en el YouTube de Minutos Musicales. En total hay 2 de Bradien y 6 de Yo La Tengo.
También os encontrareis que existen previamente múltiples videos del festival Primavera Club en Barcelona. Seguramente la semana que viene daremos alguna crítica a aquellos conciertos que más me llamaron la atención.
S@lu2.
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